28 May Reencuentro personas mayores con sus familiares
Durante estas semanas se están viviendo momentos muy especiales y emocionantes entre las personas mayores y sus familiares. El avance de las fases de desescalada está permitiendo que muchos de nuestros ancianos (que, como todos/as sabemos, ha sido considerado uno de los colectivos más vulnerables ante el COVID-19) puedan disfrutar, por fin, del ansiado y esperado reencuentro con sus seres queridos, en especial con sus hijos y nietos, a los que no habían podido ver desde que se decretó el estado de alarma, hace ya más de dos meses.
Tras muchos días de distanciamiento en los que tan solo era posible la comunicación a distancia ya fuera por teléfono, videollamada o incluso desde el balcón, muchas familias pueden verse de cerca y sentir una reconfortante sensación de alegría y la enorme satisfacción que supone este hecho.
Cabe recordar que, desde que comenzó la epidemia, tanto el colectivo de personas mayores como el de los niños/as fueron considerados principales focos de infección, lo que provocó que se decretara la separación obligada entre ambos grupos de edad.Debido a esto, muchas familias han sufrido momentos realmente duros y complicados a causa de esta excepcional medida de distanciamiento que ha impedido el contacto directo entre muchos abuelos/as y sus nietos/as durante varias semanas.
Y es que, para muchos mayores, acostumbrados a ver a sus nietos/as a menudo, la sensación de vacío afectivo que han sentido durante las primeras etapas del confinamiento ha hecho que el tan esperado reencuentro se convierta en un acto muy emotivo e intenso.
Por otra parte, muchos familiares residentes en provincias que ya han pasado a la fase 2 de la desescalada, han podido por fin visitar a los familiares que viven en residencias de mayores, lo que ha dado lugar a escenas de una enorme emotividad después de tanto tiempo de distanciamiento.
Sin embargo, no debemos olvidar que el virus permanece todavía presente en nuestras vidas, por lo que conviene no bajar la guardia y ser precavidos a la hora de seguir guardando las distancias mínimas de seguridad con otras personas, seguir usando mascarillas en lugares cerrados y donde no se puedan mantener los dos metros de distancia y respetar el resto de recomendaciones sanitarias para impedir en la medida de lo posible que surja un nuevo rebrote que eche por tierra todo el enorme esfuerzo realizado hasta el momento.
Y todo ello a pesar de lo difícil que puede suponer evitar la tentación de besar o abrazar a esas personas que tanto llevamos sin poder ver físicamente y, en consecuencia, sin poder disfrutar de su compañía.
Poco a poco vamos viendo la luz al final del túnel y para muchas personas mayores el avance hacia la“nueva normalidad” permitirá dejar atrás la soledad que inevitablemente está suponiendo el distanciamiento físico de sus seres queridos.
julio cesar ochoa
Posted at 19:38h, 11 mayoextraordinarios artículos que llegan a nuestro saber, hacer y quehacer profesional actualizando nuestros conocimientos y poderlo realizar en nuestro contexto.
puedo colaborar con articulos de investigacion y seguimiento en la tercera edad.
Julo Cesar Ochoa Manjarres
Psicologo y Pedagogo